El calentamiento global crece de una forma incontrolable, los polos se derriten, la densidad del aire aumenta y las lluvias disminuyen, siendo el agua dulce un recurso muy escaso en la superficie terrestre y a la vez más necesario que nunca. Por esta razón nace Airhunter una capa hecha a partir de textiles de microfibra que se adapta al modelo del avión y cuenta con un sistema de sujeción en las ventanas, sin la necesidad de intervenir por completo la estructura del avión. Este sistema permite captar agua del aire mediante la absorción de humedad, proceso en el cual se transfiere a través del material hidrofílico, de forma que el agua pueda extraerse o subir a la superficie. Una vez captada el agua, esta se recolecta en la parte inferior del avión (diseñada inicialmente para el equipaje de los pasajeros), dónde hay un tanque para almacenar el agua. El agua recolectada se puede extraer de 2 formas: Mediante una manguera cuando el avión está en terreno o liberándola en el aire.