El proyecto nace desde la elección de un humedal de la lista Ramsar. En este caso se eligió el salar de Huasco el cual se ubica cerca del pueblo de Pica, en la región de Tarapacá al norte de Chile. Este proyecto se desarrolla a partir de la observación de la fauna, específicamente de los flamencos, quienes al caminar dejan una onda en el agua del salar, y también una frecuencia la cual se materializó de tal forma de entregarle al usuario un espacio para poder relajarse de lo veloz y rápida que puede ser la vida citadina. En el proyecto, se encuentran 3 estaciones, la estación Wayra, Rikuy y Rirpu, las cuales preparan al usuario mentalmente para sentir, relajarse y experimentar lo que el salar puede entregarles. El objetivo es que al momento de llegar pasen por las estaciones y así logren calmar, relajar y disminuir la frecuencia que el usuario trae desde la ciudad.