El mirador en los buques salitreros nace de la idea de contemplar y devolverle el valor a la estructura existente de las viviendas obreras, utilizando las amplias calles y la vista sobre las alturas de los cielos de las habitaciones; generando un recorrido que parte por los caminos en el suelo, y que mientras, se sube por estructura apunta a los lugares más característicos de la fábrica salitrera. Su forma se inspiró en la fauna del norte de Chile, los flamencos de patas largas que se posan en las aguas viéndose tan livianos que parecieran flotar en ellas. Una intervención que envuelve el suelo y las alturas al igual que estas aves que resaltan y contrastan con su entorno. Una estructura como una trama entrelazada con diagonales que suben y poco a poco te guía a seguir un camino por todo el amplio de los buques. Este nuevo espacio da la oportunidad de revitalizar la existencia de este patrimonio para darle un nuevo uso pero sin desvalorizar su característica más llamativa el abandono.